Archivos Mensuales: agosto 2022

Genealogía familiar

Hace unos días hablando con alguien sobre las familias me surgió la pregunta de cual era la mía. Recuperando un árbol genealógico que heredé de mi padre, estuve viendo y confirmando una serie de datos que me llevan a pensar en el camino que he seguido en mi vida.El árbol engloba las dos ramas materna y paterna desde mis bisabuelos. Centrando en la paterna tengo diecinueve primos, de los cuales soy el más pequeño nacido. Algunas de mis primas paternas ya han muerto, pero han dejado descendencia, con lo que me encuentro con primos segundos de mi misma edad y algo más mayores.

Ni que decir tiene que apenas si los conozco, ya que ni siquiera somos de la misma localidad ni hemos tenido apenas relación. Esto me lleva a reflexionar sobre lo distinto que es hoy todo. Los vínculos familiares se han ido rompiendo por dejadez, por falta de contacto, por falta de interés, por dispersión. De los que quedan en el sitio original no tengo apenas noticias. Mi nexo de unión es una de mis primas que hablamos regularmente por teléfono, pero a la que no pregunto por sus hermanas y sobrinos, salvo si hay alguna variación. Ella tiene dos hijos con los que tampoco tengo trato, ya que ambos viven fuera del lugar de origen.

Con la rama materna sucede lo mismo. Tengo seis primos. Todos marcharon del origen, unos a un sitio, otros a otro y allí han crecido y se han establecido haciendo su vida, al igual que yo he hecho la mía .También mantengo un vínculo por esta rama con otra prima que me informa de lo que sabe de sus hermanos y de dos primos comunes que tenemos en otra ciudad.

La ley de la dispersión ha hecho que muchas familias sigan el mismo derrotero que la mía. No me siento solo ni ignorado ya que las circunstancias son las que son.  Por mi parte el árbol ha generado dos ramas que apenas si conocen a alguien de la zona de origen, ya que han orientado sus vidas en otra dirección, e incluso están fuera del ámbito en que se criaron.

Aquel núcleo familiar tan extenso del que la rama paterna tuvo diez hijos, de los cuales cuatro tuvieron descendencia se ha diluido de tal modo que ni siquiera los apellidos nos llevarán a coincidir en algún punto de nuestros caminos.  Tal como está el mundo puede suceder que uno de mis nietos se cruce con uno de los otros y sin saber que son primos en cuarta generación lleguen a tener descendencia.

Algo se ha perdido en el largo camino de nuestras vidas. Creo que se ha perdido el espíritu familiar, de ahí que las gentes cada día tiendan menos a colaborar entre sí, ya que nuestros caminos nos han llevado a un punto en el que con ayudas de ajenos e incluso sin ellas hemos llegado hasta este mismo momento. No se si es bueno o malo pero he observado que este mismo fenómeno está en el núcleo familiar por parte de mi pareja. Una vez que han salido del origen, a pesar de los medios de comunicación modernos, los lazos entre nosotros se han ido alargando y apenas si nos vemos. Los primos se mantienen en contacto de modo mecánico gracias a la tecnología, pero se perdió aquella inquietud por estar juntos al menos una vez al año. Hemos simplificado la familia como si de una ecuación se tratara a la mínima expresión. Vivimos las parejas originales en nuestro hogar viendo la dispersión de la descendencia a lo largo de este mundo cada día más pequeño.  Quizás sea el precio que tenemos que pagar por este progreso que como un futuro nos alcanza día a día.

No era suficiente

NO ERA SUFICIENTE.

No era suficiente el calor del verano

había que subirlo algunos grados

y alguien se ha dedicado arteramente

a incendiar nuestros bosques tan preciados.

Y por si fuera poco lo sudado

un volcán en Islandia se ha encendido

uniéndose a la fiesta del calor

que calienta este mundo y su latido.

Caliente está de momento el ambiente

y los rusos en guerra  a la porfía

llenando de cohetes a las gentes

en Ucrania con saña noche y día.

Pero no para ahí el festival

los israelitas están bombardeando

y los chinos que siempre serán más

a los soldaditos ahora están jugando.

No es suficiente el calor del verano

este festival de iniquidades puede

conseguir que el lugar donde moramos

se haga inhabitable en un momento breve.

Que alguien pare este sin sentido

pues del planeta no podemos bajarnos

y si se rompe díganme que es lo que haremos

con lo estúpidos que somos los humanos.

                            6/8/2022